Fátima Drammeh
· Entrevista
Me podrías hablar de tus orígenes y familia.
Yo soy de origen gambiano. Mi padre llegó a España muy joven. Cuando pudo tener estabilidad económica trajo a mi madre, después nacimos nosotros.
Yo soy la penúltima de siete hermanos, cinco chicas y dos chicos. Yo nací en 2003.
¿Qué significa para ti llevar el hijab?
Que una mujer musulmana lleve el hijab le una identidad y un respeto. No me refiero que la que no lo lleve no sea respetada, no me refiero para nada a esto. Me refiero que a medida que vas creciendo y siguiendo la religión, la mayoría de las religiones piden modestia. Nuestra religión nos pide la modestia total, que te cubras, que las otras personas no puedan ver tu belleza.
Cuando llevas hijab vas modesta, vas tapada, y esa vida no es fácil. Normalmente los primeros años de las chicas hijabis no son fáciles. Es un esfuerzo muy grande y no todas se sienten capaces de cumplirlo, y es más si son jóvenes.
¿En qué notas ese esfuerzo?
Por ejemplo, cuando es verano, que hace calor y no puedes ir destapada. A la hora de ir modesta y a la vez socialmente a la moda, entre comillas, es difícil encontrar ropa adecuada. Es complicado encontrar ropa de verano con esos parámetros.
A la hora de ir a tomarte algo con tus amigas, todas tus amigas llevan ropa corta. Quieras que no, si todo tu círculo lleva ropa corta, no lleva hijab, te acaba afectando. La mayoría de mis amigas no lo llevan, y noto la necesidad la rodearme de chicas que lo lleven. Me hace falta esa “vitamina”, necesito que mi círculo de amistades entiendan del todo, necesito que me aconsejen con cosas, la familiaridad de conocer la religión y la cultura.
¿Qué es lo que hace que sigas vistiendo así aunque sea difícil?
Básicamente el amor que le tengo a la religión. Una persona religiosa va a seguir los parámetros que le pide su religión.
Por ejemplo, puede que se te presenten muchas piedras para dejar tu país de origen, y entonces lo que harás será esforzarte, hacer todo lo posible para conseguirlo.
Y es una cosa parecida. A mí me gusta la religión y quiero estar cada vez más cerca, creo totalmente en mi religión, y por tanto voy a esforzarme por ser religiosa y sentirme satisfecha conmigo misma. Independientemente de las piedras que encuentre en el camino.
¿Cómo ha sido para ti entrar al mundo de la moda en relación a el compromiso de ir vestida modesta?
Tengo una muy buena amiga llamada Salma que vive en Madrid, y ella me fue aconsejando y me advirtió de las piedras que podría encontrarme en el camino ya que ella también trabaja como modelo.
Entonces entré preparada, entre comillas! a este mundo.
Sí me he llevado ciertos comentarios, ciertas miradas, pero bueno es el día a día de una mujer musulmana…
Incluso creo que fue mucho más difícil para ellos [los clientes que me contrataban] que para mí. Creo que para ellos fue mucho más chocante que una chica hijabi saliera en su campaña que para mí trabajar como modelo.
¿Crees porque no están familiarizados con ese tipo de estética?
Marcas no españolas me reciben mucho mejor. Pero con marcas españolas me he encontrado mucho más pegas y he tejido que dar más explicaciones de porqué llevo hijab. Las marcas de fuera con las que he trabajado me han acogido mejor.
El mundo de la moda es de la imagen y del mostrarse. Cuando me hablas del valor de la modestia, que tiene que ver con el cubrirse y el no mostrarse. ¿Me pregunto cómo se unen estos dos conceptos?
Yo siempre recalco que soy una chica hijabi que me visto de una manera modesta. Ya me ha pasado que me han cancelado en el día del shooting porque no quiero llevar una prenda. Me ha pasado y lo he pasado muy mal.
A veces no hay buena comunicación con el cliente, y cuando llego se sorprenden.
¿Qué tipo de prenda pusieron que tú no aceptaste?
Me cancelaron una marca de relojes caros, pedí un día libre en el trabajo y finalmente me cancelaron. Yo les había avisado sobre el vestir, creo que fue mala comunicación.
¿Y eso fue en relación a la ropa que tenías que llevar?
No en este caso no, muchos de los trabajos que hago son belleza, joyas, cosméticos, a veces electrodomésticos.
¿Cuál fue el motivo entonces de que te cancelaran?
Me comentaron que fue por la guerra de Palestina porque había un conflicto con los inversores que tenían supongo. Deben de tener algún inversor pro-Israel y no querían a una chica musulmana.
Sólo me comentaron que la causa era la guerra y había un conflicto con los inversores.
Bueno, pienso que la apariencia de cualquier persona tiene unas connotaciones u otras.
Sí, en parte yo represento a todas las chicas hijabis en España.
¿Cómo te sientes con eso?
Al principio sentía un poco de presión, por ejemplo vigilar lo que subo, en caso de que fuera un poco contradictorio y que me criticaran y me dijeran de todo.
Pero ahora ya lo llevo con más calma. No lo tengo en cuenta, vivo como cualquier persona normal, subo lo que me da la gana, hago lo que me da la gana. Sí, represento a otras chicas musulmanas, pero es mi día a día, yo supongo que es como el día a día de otras de las chicas, por lo tanto no se me hace difícil.
¿Cómo ha sido la recepción dentro de la comunidad musulmana, por parte de otras mujeres, tu decisión de dedicarte a ser modelo? En relación a los conceptos de modestia, por ejemplo, el maquillarse, ser fotografiada ¿qué opiniones despierta? Ha habido alguna crítica.
Siempre hay críticas, positivas y negativas. Me he llevado comentario como “la mujer no se tiene que mostrar para nada”, aunque sea tapada no se debería mostrar.
También me he llevado críticas positivas, diciéndome que es muy importante que esté dando voz a chicas hijabis. Me he llevado críticas de los dos extremos. Pero yo sigo lo que me da la gana, si hoy me apetece hacer un casting o un shooting lo voy a hacer independientemente de las críticas.
¿Estas decisiones surgen de la confianza en ti misma, de confiar en lo que tú consideras correcto?
Sí, así es.
En esta imagen dos elementos de tu vestimenta indican mensajes muy simbólicos, la abaya con la que cubres tu cuerpo y tu pelo como mujer musulmana y la boina negra, que nos recuerda a los movimientos antiracistas de los años ’70. ¿Cómo te sientes al simbolizar la feminidad islámica y antiracista en esta imagen?
Considero que es toda mi identidad, al ser mujer, al ser musulmana, que se representa con la abaya que llevo, y al ser mujer negra también, con la boina.
Elegí la abaya roja porque es un color muy visible y ante todo quería representar que soy una mujer musulmana.
Otro de los simbolismos que hay en ese retrato son tu fortaleza y tu independencia en tu expresión. Hemos hablado anteriormente de las idea de independencia en relación a los valores musulmanes y a los valores más occidentales.
Yo te percibo como una persona muy independiente: desde muy joven has buscado tus oportunidades como modelo, conduces, tomas tus propias decisiones.
Esta independencia es un punto muy importante cuando se habla de la mujer musulmana, porque se habla mucho de que no hay una libertad, de que hay una sumisión.
Exacto, se dice que hay una sumisión por debajo del hombre, y es totalmente lo contrario. El hombre está ahí aconsejándote, las parejas nos aconsejamos mutuamente, nos acompañamos mutuamente. La religión pide que el hombre apoye mucho más a la mujer, pero la mujer es totalmente independiente.
Que haya países que no dejan conducir a la mujer, esos son temas culturales, que haya países que obligan a la mujer a sumisión total al hombre, ya es una cuestión cultural. La religión no dice para nada eso. La mujer puede ser totalmente independiente, puede tomar sus propias decisiones.
Los valores musulmanes han sido valores que se inculcaron en tu casa, en tu familia.
Sí, ha sido muy familiar. Mi padre estudió, y mis hermanos también. También la comunidad me han enseñado muchas cosas. Ha sido una combinación de experiencias y enseñanzas en diferentes espacios; pero mis hermanos especialmente me han ayudado mucho. Sobre todo, me han ayudado a que no me dé vergüenza preguntar. Es un mundo -el de la religión- en el que te haces muchas preguntas, y puedo agradecer a mis hermanos que me hayan abierto la puerta a poder preguntar sin sentir vergüenza.
Las redes sociales, como Tiktok, me ha ayudado a la hora de buscar información, para recomendaciones de libros, etc.
Me imagino que Tiktok tiene un alcance más amplio, puedes entender las realidades de la práctica del Islam en diferentes lugares. ¿Cómo vives tu religión en España? ¿Están cambiando las cosas? ¿Cómo ves el futuro?
Creo que la educación respecto a la religión va mejorando. Digo esto porque cuando nuestros padres vinieron, eran la primera generación de personas negras musulmanas en España. En ese momento ellos asimilaron muchas costumbres de aquí, como por ejemplo celebrar la Navidad. Las Navidades no se celebran por los musulmanes.
Mis padres me daban regalos en la ocasión de Reyes Magos para que no me sintiera diferente a mis compañeros. Con los años he ido entendiendo estas cosas y también pienso en que tomaré mis propias decisiones con mis hijos. Quizás les de regalos para Reyes, pero les daré una explicación del porqué, no diré que son tres Reyes Magos sino que soy yo la que les doy ese presente.
Yo siento que yo puedo hacer estos cambios en mis hábitos, hay algunas personas que no. Yo entiendo porqué lo hicieron nuestros padres, siendo la primera generación se sintieron influenciados.
Tú hablas catalán, lo usas para tus estudios, con tus hermanos. Y quería preguntarte de dónde te sientes ¿cuál es tu relación con Cataluña y con Gambia?
Yo me siento de los dos países, me siento super catalana, hasta me cuesta expresarme en castellano a veces! Pero la comunidad musulmana que conozco habla mi lengua materna, así que me siento igual de acogida en Gambia que aquí.
Girona, Cataluña España 2024